La República Dominicana nos atrae por sus playas y nos atrapa por su historia.
El día que Cristobal Colón llegó a la isla de las Bahamas Guanahai, a la que rebautizó como El Salvador, la historia del mundo comenzó a cambiar; en aquella isla en célebra navegante genovés se encontró con un pueblo indígena, los taínos, pero como creía estar en las Indias, se refirió a ellos como indios; antes de regresar a España tras este primer viaje las naves de Colón llegaron a Cuba y a la isla que comparten hoy Haití y la República Dominicana, una isla a que llamó La Española; allí lo esperaban los taíno-arawak y allí, en la parte dominicana, te espera a ti tu propio descubrimiento, el mismo que hizo Colón pero con más comodidades, el de la cultura taína.
Hoy en día la República Dominicana es un país diverso, cuna de razas y culturas, pero mantiene muy vivo su origen, sus raíces precolombinas que son las de la cultura taína; cuando Colón llegó a la República Dominicana allí vivían los taíno-arawak, organizados en múltiples reinos cada uno de ellos gobernado por un jefe, coexistían en paz; cada reino ocupaba un claro dentro de la isla, no en la costa, y se organizaban alrededor de su jefe que era en realidad un cacique y era el más noble representante de la tribu; junto a él vivían los nitaínos que eran considerados también nobles porque eran los guerreros y en su mayor parte familiares del cacique; el resto de los habitantes de cada reino eran o bien behiques, representantes religiosos, o bien naborias, que trabajaban la tierra.
El puesto de jefe o cacique de cada reino era hereditario y se trataba siempre de un gobernante que exigía obediencia, dicho de otro modo, era algo así como un dictador; ¿y en cuanto a sus creencias? eran poloteístas, creían en varios dioses y también en seres sobrenaturales, Yocahú era la divinidad suprema y los cemíes eran los dos seres sobrenaturales a los que se rendía culto, eran los progenitores de todos los taínos. Claro que no todo iba a ser mando y fe, los taínos disfrutaban también de actividades de ocio como el baile o el juego de pelota (batú) que practicaban tanto hombres como mujeres.
Todo esto y mucho más lo descubrirás en tu próximo viaje a la República Dominicana si sigues nuestros consejos y visitas lugares como el Museo del Hombre Dominicano en Santo Domingo o el Museo Arqueológico Regional Altos de Chavón; te recomendamos que disfrutes de estas visitas en los primeros días de tu estancia en la República Dominicana ¿por qué? Porque así sabrás cómo vivían los taínos a los que conoció Colón, en qué creían, qué comían, cómo se divertían… y podrás descubrir tú mismo los rasgos de la cultura taína todavía presentes en la sociedad dominicana y en su gastronomía; una pista: el casabe de yuca que probarás en muchos platillos típicos dominicanos es uno de esos rasgos taínos que se mantienen muy vigentes hoy en República Dominicana.
